Ecuador enfrenta una de las crisis económicas más severas en su historia reciente. Los racionamientos de energía, que alcanzan hasta diez horas diarias en distintos horarios, han dejado una estela de estragos en la economía nacional. Aunque todos los sectores han sentido el impacto, el ámbito empresarial ha sido el más afectado, con apagones que han puesto en jaque a los negocios, generando millonarias pérdidas.

Se estima que los cortes de electricidad de entre ocho y nueve horas diarias han provocado pérdidas cercanas a los $700 millones en ventas para el sector formal de la economía. Este golpe es aún más severo para las microempresas, que carecen de los recursos para adquirir generadores eléctricos. Incluso aquellas que han optado por comprarlos enfrentan gastos adicionales en combustible, lo que erosiona aún más sus ya frágiles ganancias

Frente a este panorama desolador, la digitalización se perfila como una posible solución. En este contexto, Mercado Libre ha decidido actuar, ofreciendo una plataforma de e-commerce que busca aliviar parte del impacto negativo. Para incentivar a nuevos usuarios, la empresa ofrece un 50% de descuento en su primer pedido, una oportunidad única para adquirir productos a precios competitivos. Los usuarios recurrentes también tienen beneficios, con descuentos del 30% en una amplia gama de productos, que incluyen tecnología, moda y artículos para el hogar.

Ambas promociones incluyen envío gratuito en todo Ecuador, eliminando una de las barreras más comunes para los compradores en línea: los costos adicionales de transporte. Ya sea en Quito, Guayaquil o en pequeñas localidades, los usuarios pueden recibir sus compras sin costos extras. Además, las compras están protegidas, garantizando que los clientes reciban los productos en perfecto estado o, en su defecto, puedan solicitar reembolsos en caso de problemas.

En medio de esta crisis, Mercado Libre no solo busca beneficiar a los consumidores, sino también apoyar a las empresas ecuatorianas que se enfrentan a la incertidumbre de despidos, desabastecimientos y posibles cierres. Las ofertas, además de representar una oportunidad para cuidar el bolsillo de los ecuatorianos, son una esperanza para mitigar los efectos devastadores de los apagones en la economía del país.